Quién no ha esbozado una sonrisa torcida leyendo a Mafalda? Esa niña que con toda su inocencia decía verdades que valían para cuando fue publicada, pero también para ahora. Me encanta releer el libro que tengo de vez en cuando.
Me encanta cuando no le dibuja boca. Puedes imaginar la expresión que más te guste.
En este
link podéis leer la historia de Mafalda, y ver una tira de cómo fue evolucionando a lo largo de los años.
Estupenda funda, Rida.
ResponderEliminarSaluditos
Me encanta! ¿Venderías una igual? :)))))))
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