Bar La Peña - Patatas Bravas

Soy un rato maniática con las patatas.  Me chiflan, pero solamente me gustan algunas.  Por ejemplo, las patatas fritas de bolsa Lays al punto de sal.  Nada más.  Y las deshidratadas.

Lo mismo me pasa con las patatas bravas.  Hay muy poquitos sitios donde me gusten.  No sólo por la salsa, que ya es un arte en sí mismo, sino porque en muchísimos sitios, por querer correr mucho, hacen los trozos grandes y luego quedan crudos.  No hay nada que me de tanto asco como encontrarme una patata medio cruda.

Sin embargo Luis ha conseguido la receta perfecta.  No he encontrado ni una sola patata ni un poquito cruda.  No sé cómo lo hará, pero están realmente buenísimas.

De hecho, a medida que la gente se va dando cuenta y las va probando, cada vez las pide más.

¿A que apetecen?