lunes, 26 de febrero de 2007

El SAL de Mercedes


Por fin me he puesto manos a la obra. Voy con unas cuantas semanas de retraso, pero dicen que nunca es tarde si la dicha es buena!!

Como no encontré un fieltro normal que me gustara, compré ese rojo, que es doble, por el otro lado es blanco. Realmente es precioso, pero claro, difícil de coser. También le da más cuerpo al costurero.

Este fin de semana también me decidí por fin a utilizar la técnica del cosido por detrás para actualizar un niki.

Primero busqué una flor bonita. Tengo unas telas de organdí o algo parecido de cortinas, y tenían estas flores blancas grandes tan bonitas.

Recorté la flor dejando un margen amplio, la puse con unas alfileres en el revés del niki y lo cosí con puntada normal en la máquina. Lo de hacer curvas con mi máquina no es algo fácil, pero en la pelea gané yo.
Con unas tijeritas muy afiladas, mi nueva adquisición en Tendencias Creativas, recorté la camiseta por el derecho, a más o menos medio centímetro de la costura, de forma que al final quedó la flor a la vista.


Me ha encantado tanto el resultado como la técnica. No será la última que haga.

Mi pelea con la máquina de coser este fin de semana ha sido épica. Y no siempre he salido victoriosa, la muy rebelde se me resiste.

He aprendido a que la ruedecita de la tensión no está de adorno, que realmente sirve para algo.

Y esos números de las agujas que siempre han sido un misterio para mí, también tienen algo que ver con que la máquina cosa mejor o peor.

Que si voy a bordar, tengo que poner la aguja más finita para que la tela se rompa menos.

He descubierto que mi máquina puede bordar. Es decir, tiene un levantapresillas para que la tela no corra, así que en buena lógica, tiene que poder hacer acolchado libre. Aunque todavía no lo he conseguido.

El caso es que he conseguido hacer otras tres mariposas, dos de ellas sin entretela, que es como a mí más me gustan. Aquí se ve mi progreso entre corazoncitos y mariposas. ¿Qué os parece la combinación de colores? En total tengo que hacer 49 bloques. 8 mariposas y el resto corazones.
Ayer por la noche, cuando me iba a sentar a aplicar algún que otro corazón más, vi que mi cestito de costura del salón estaba un rato triste. Ni una triste almohadita para las agujas. Y todas decís que son fáciles y rápidos de hacer.

Así que ni corta ni perezosa me busqué un paper piecing de cabaña de troncos en la red, y con los restos de telas que tengo en una cajita me puse a hacer una almohadita. Como soy novata en todo esto, hice casi tanto como deshice y me llevó algo más que "un ratito"

Tengo pocos restos, así que no había mucho que hacer con las combinaciones de colores, pero al menos queda colorida, graciosa y tengo un sitio donde poner mis alfileres.





viernes, 23 de febrero de 2007

Tendencias Creativas - Las servilletas

Pues sí, también me ha picado el gusanillo de las servilletas.

He hecho alguna cosilla con servilletas, pero como no tenía los medios adecuados, ni los encontraba, pues no me atrevía con las bandejas de cristal.
Pero en el famoso Tendencias Creativas había varios stands que mostraban cómo decorar con servilletas, y por supuesto tenían los medios adecuados.
Había un stand donde decoraban las bandejas por debajo con una especie de restos de taladro (ya sabéis, cuando haces agujeros a un papel, los redondelitos que sobran), y que pegados y combinados en diferentes colores resultaban unas bandejas preciosas.
Así que me compré el pegamento especial (se parece mucho al blanco de toda la vida, pero más aguado), y otro producto para cristalizar el resultado después.
En un "Todo a 100" encontré estas bandejitas de cristal transparente y baratito, ideales para hacer pruebas.




Y de momento tengo dos. He hecho una tercera, pero como no me ha gustado el resultado, la tengo en remojo, para limpiarla. Es la ventaja del cristal, que siempre se puede volver a limpiar.

Y también he aprendido algo: primero se echa el pegamento, y luego la servilleta, incluso en cristal. Porque si no lo haces así, corres el riesgo de que se te hagan minibolsitas de aire. O a que en el intento de quitar esas minibolsitas de aire se te rompa la servilleta y tengas que empezar de nuevo.

También compré unas cuantas servilletas con unos dibujos preciosos. Un poco caras sí que me parecieron, pero bueno, realmente le sacas mucho partido a una sola servilleta.

Lo más difícil de esta técnica es el diseño. Tardo más en ver qué dibujo pongo dónde y con qué lo combino, que luego en recortar y pegar.

Y en estos dos casos he finalizado pintando con pintura americana normal el fondo. Y luego les he echado el producto vitrificante.

Una técnica muy interesante, y sirve incluso para lámparas, que no se quema ni estropea. Habrá que probar.

jueves, 22 de febrero de 2007

Mi maravillosa máquina de coser

Hoy estoy emocionada. Yo creía que iba a tener que cambiar de máquina de coser, porque no conseguía hacer gran cosa con la mía.

¡Craso error! El problema no es la máquina, el problema soy yo.

He intentado un montón de veces bordar alrededor de un dibujo (o una aplicación) y mi máquina siempre se enganchaba.

¡Si es que hay que leerse las instrucciones!

Tengo una preciosa cajita negra que vino con la máquina y que tiene distintos tipos de patilla de arrastre. ¡Solo tenía que utilizar la correcta!

Ayer se me ocurrió cambiarla, y fijaros lo que he conseguido:

Claro, que la conseguí después de un montón de errores. En el libro están cosidas con hilo transparente en zig-zag. Eso no me gusta seguro.

Así que recorté las piezas con un poco de margen, para aplicarlo a mano con puntada escondida. Tampoco funcionó. Son tres telas puestas encima una de otra, y lo del dobladillo no quedaba nada bien.

Tercer intento, poner tela de la que pega por los dos lados, pegar todas las piezas y repasar a mano.

Empecé bien. Recorté las telas, las planché a la tela de pegar... Y no hubo forma de despegar el papel después. ¿Cómo se hace?

Así que no me quedó más remedio que acudir de nuevo a mi máquina de coser. ¡Y funcionó!

Ahora solo tengo que conseguir un poco más de práctica para dar los giros y esas cosas, pero bueno, como comienzo, creo que no está mal.

Este es mi nuevo proyecto, una colcha de corazones y mariposas en tonos cálidos (rojos, naranjas, ocres, cremas, rosas...)

Estoy utilizando una buena parte de los retales que compré en Tendencias Creativas. y como necesitaré más, es una buena forma de aprender a combinar colores.

miércoles, 21 de febrero de 2007

Marie-Thérèse Saint-Aubin

Ese es el nombre de la autora del maravilloso libro de gatitos que me compré en Tendencias Creativas en Bilbao.


Y esta la dedicatoria que me escribió en perfecto francés, y el regalito que me hizo, una aguja para el punto de cruz.

Y algunas muestras del contenido.


Tiene un blog, donde se pueden ver más obras suyas, y también solicitarle/comprarle gráficos.

De verdad merecen la pena.

Tendencias Creativas - El Fimo

Había Fimo en varios stands, pero me gustó especialmente uno que pertenecía a una tienda de Bilbao (no recuerdo su nombre, pero está por el centro de Bilbao).



Allí había una chica haciendo demos. Tenía una de esas maquinitas para aplastar el fimo y hacer láminas finas. También tenían allí mismo un horno pequeño portátil, donde cocían las piezas.



Hizo unos colgantes y pendientes en negro y azulón que quedaron preciosos. La pena es que no le hice fotos.



El caso es que por fin conseguí el barniz para Fimo. He de decir que fueron muy amables, porque no lo tenían y lo fueron a buscar a su tienda.


Y viendo que aquello no parecía muy complicado, me compré unos colores y estos son mis experimentos:

El primer intento. No me gusta nada, y creo que voy a deshacerlo. Los pendientes están bien, pero el collar creo que quedaría mucho más bonito mezclándolos con nudos de macramé y separando más los abalorios. En un collar largo.


Pendientes en rosa y gris. Ya tienen dueña, mi suegra se enamoró de ellos. Pendientes en naranja y amarillo con brillitos. Me encanta el color que quedó mezclando el rojo vivo y el amarillo.

Pendientes del barca. Azul, rojo y amarillo, mezclados en dos estilos distintos. Estos son los más pequeñitos.

Pendientes en amarillo y verde. El verde lo conseguí mezclando el amarillo y el azúl. También han quedado muy bonitos.

Y la joya de la corona:


Conjunto en azul, rojo y amarillo. Hice primero un cilindro con las flores. Un cilindro rojo para el centro, cinco cilindros amarillos para los pétalos y varios cilindros azules para cerrar.

Luego corté el cilindro de las flores con un cutter, y fui colocando las flores en las bolitas con un palillo. Una vez colocadas las flores le di un par de vueltas en la mano para redondear el conjunto, y ya está.

Ví un vídeo sobre cómo hacerlo en internet.

No me ha quedado ni la mitad de bien que en el vídeo, pero para ser mi primer experimento, creo que me puedo sentir orgullosa.

Me gustan muchísimo los pendientes de fimo, creo que compraré más colores y haré algunos más.

lunes, 19 de febrero de 2007

Tendencias creativas - Los stands y los quilts antiguos

Había todo tipo de stands. Concretamente éste versaba sobre bordados con cinta, con hilos de colores... Las letras que se ven en esta foto me parecieron preciosas, muy trabajadas.
Un quilt en venta, con botones, no acolchada. También se ven más stands. Había muchísimos de telas para quilts, aunque no entiendo porqué las telas son tan caras en España. Igual que en Francia, porque los precios de los stands franceses estaban por un estilo.

Muchos de los stands tenían además quilts expuestos, a cual más bonitos. Este ya es de la exposición. Es un quilt antiguo. Cuando lo ví me sorprendió que alguien tuviera el mal gusto de poner un quilt torcido y mal acabado en una exposición. Comprendédme, es mi primera exposición.

Resultó que era de 1800 más o menos. Y estaba hecho con trocitos de diferentes tipos de telas. Cuando me acerqué vi que una tela se parecía mucho a un traje que tengo. Por eso la diferencia de alturas. Según las telas fueran más o menos gruesas.

Y este es otro, algo más moderno, y con menos tipos de telas, pero también con muchísimos colores.

Un quilt que me sorprendió por su técnica. Es una tela de fondo, cosas puestas encima (cintas, trocitos de otras telas, restos de otros trabajos...), con un tul por encima y acolchado directamente a máquina. El resultado me impactó y parece algo fácil de hacer, siempre y cuando se acierte con los colores, claro. Estos quilts estaban en una esquina de un stand. Me parecieron originales y muy coloridos. Especialmente el de las flores me parece interesante para hacer. Están aplicadas.




miércoles, 14 de febrero de 2007

A escondidas le hice este cojín a Joaqui para celebrar San Valentín, y le ha encantado!!

¡Feliz San Valentín a todos!

Tendencias Creativas - Punto de Cruz

Pregunta mi hermana por el Punto de Cruz. Pues sí que había, y mucho.


Nada más entrar había dos exposiciones, una de quilts, que ya pondré, y otra de punto de cruz.
Sobre todo había cuadros de Eder Kits. Montones preciosos en blanco y negro, uno del Guggenheim muy logrado, algunos infantiles muy coloridos y divertidos, un piano que parecía que brillaba de verdad, un vaso con gotas de agua que parecían de verdad y algunas otras maravillas. No tengo fotos de todas, pero alguna muestra sí que podeis ver aquí.
Me gustó especialmente cómo habían enmarcado a la Madame Pompadour. Las columnas de los laterales están pegadas en el cristal por dentro. Quedaba espectacular, porque además el cuadro es grande.

Había otro stand, que a mí me pareció novedoso, con unos cuadros de punto de cruz que parecían sacados de pintadas en paredes.

Unos puntos pequeñisimos, en lino casi todo y con un solo hilo.

Los diseños espectaculares y el resultado ni os cuento. Ni idea de quién ha hecho tantísimos cuadros, pero seguro que no ha sido una sola persona. Habría necesitado una vida entera.

También había un stand con diseños para saquitos, alfileteros, y otro montón de cosillas que se suelen hacer en lino algo más oscuro. Son como muestrarios. No sé cómo se llama ese tipo de diseño, entre otras cosas porque hoy poy hoy a mí no me llama la antención, pero sé que en general en Francia gusta mucho y que también hay varios blogs en los que publican cosillas hechas de ese estilo.

En los stands había muchos cuadros que yo ya conocía, pero claro, no había visto más que en foto. Y no es lo mismo. El punto de cruz hay que verlo en vivo y en directo. Los tamaños son distintos a lo que me imaginaba, y por supuesto el brillo, la pedrería, el acabado... Auténticas preciosidades.

Pude ver una de las damas celtas terminadas. Estoy en varios grupos de punto de cruz, y sé que muchas han hecho alguna dama celta. El caso es que aunque me gustaban, tampoco me parecían tan espectaculares. Pues os diré que sí lo son. Las fotos que había visto hasta ahora no le hacían ningún favor. Son divinas, y creo que serán un proyecto que tendré en la cabeza para el futuro.

He dejado para el final lo que más me gustó. Era un stand con un montón de pequeños cuadritos, sólo esbozados, muy delicados, bordados en lino con un solo hilo en un solo cuadro. Vamos, que al principio pensé que estaban pintados.

En un rinconcito del stand había una señora vendiendo libros y me acerqué. Resulta que la señora es la diseñadora de estos gráficos. Primero hace el dibujo en papel milimetrado, luego va bordándolos y a la vez corrigiendo el gráfico. Por cierto, todo esto me lo explicó en perfecto francés. Y yo intentando recordad mi francés del cole.

Ahora no recuerdo su nombre, pero lo buscaré. Le compré un libro con gráficos de gatitos, que nos dedicó a Misha y a mí también en perfecto francés y que ya os enseñaré más en detalle. ¡Qué preciosidades! ¡Y tan delicadas! Me quedé con ganas de un gráfico que tenía allí de peces, con un brillo tan especial!

Otra cosa a añadir a la lista de cosas que algún día quiero hacer.

viernes, 9 de febrero de 2007

Olvidar la historia

Hoy estoy un poco triste.

Ayer hubo elecciones Sindicales. Da igual qué sindicatos sean, eso no es importante en esta historia.

Teníamos un Jefe del Comité de Empresa desde que se montó la primera empresa (la nuestra) fuera del país de origen de nuestra multinacional. Ha sido el mismo desde hace 18 años.

Luchó todos esos años para conseguir un montón de ventajas para los empleados. Trabajamos bastantes menos horas al año que lo que dice el Convenio del Metal, tenemos comedor casi totalmente financiado, jornadas reducidas y jubilaciones anticipadas en excelentes condiciones para quien quiere, paga completa cuando se está de baja, da igual el tiempo, y toda una serie de otras ventajas que no detallaré aquí que hacen que trabajar donde trabajo sea realmente un privilegio.

Llevo aquí también casi desde el principio, y he visto cómo ha luchado, negociado, presionado y hecho todo lo posible para conseguir cosas que yo pensé que jamás le concederían.

Desde las últimas elecciones hemos duplicado la plantilla, ha habido tiempos de bonanza, buenos proyectos, y todo ha ido genial. Entró muchísima gente recién acabado FP de ramas técnicas, se estaba dando prioridad a contratar jóvenes, especialmente.

Todos esos jóvenes se han encontrado ya con unas condiciones excelentes, y no han visto nada más, nunca han trabajado en otras empresas. Creen que las ventajas que tenemos aquí son normales, que tienen derecho a ellas y les parecen pocas. Creen que el Jefe del Comité que tenemos no es lo suficientemente agresivo y que hace poco por ellos. Porque no grita, no hace mítines políticos y consigue las cosas negociando.

Eso ha devenido que en estas elecciones haya ganado el sindicato contrario, que hoy por hoy no ha demostrado absolutamente nada, sólo que grita más y mejor. (Veis, en oficinas, donde la plantilla tiene más antiguedad y conoce la historia, eso no ha ocurrido)

¿Es que la historia ya no se tiene en cuenta? ¿Es que haber luchado y trabajado tantos años por conseguir ventajas sociales y monetarias de todo tipo ya no tiene valor? ¿Es que los jóvenes de hoy no aprecian lo que tienen?

¿Porqué hoy se escucha más al que grita que al que consigue cosas? ¿Porqué escuchamos más las promesas vacías de futuro, que lo que de verdad se ha hecho? Y esto vale tanto para mi historia como para el tema político general.

No digo que a veces los cambios no sean buenos. Seguro que sí. Pero olvidar la historia y no apreciar lo que se tiene, seguro que no puede llevar a nada bueno.

Por eso hoy estoy un poco triste.

miércoles, 7 de febrero de 2007

Tendencias Creativas - los talleres

¡Qué maravilla de Feria!

Fui el jueves, el primer día de la Feria, yo solita. A las once en punto estaba en el BEC haciendo cola. ¡Qué montón de gente!

Me fui directa al fondo, a apuntarme a los talleres de Patch a máquina, que a eso iba realmente. En la foto se ven las muestras de lo que enseñaban en cada módulo.

Y aquí debajo el resultado de lo que hice yo. Salí encantada. Lo primero que aprendí fue a hacer crazy. Nunca lo había hecho y en las descripciones no me aclaraba con eso de que pintas por un lado y coses por el revés y todo eso. Resulta que es la mar de fácil. Hicimos el bolsito chiquitito.

Lo siguiente fue aprender a hacer aplicaciones por el revés. Es decir, coses las telas por detrás y luego recortas por delante. El resultado es que se ven las telas que pusiste por detrás. Había visto esta técnica en una de las revistas que tengo y me gustó muchísimo, porque le ponían unas flores preciosas a un niki. Pero no acababa de entender las explicaciones. Ahora ya sé cómo se hace, ya puedo decorar alguno de mis nikis.

Ese mismo día por la tarde estve haciendo la fundita para el móvil. Primero aprendí a hacer aplicaciones con máquina de coser, que tampoco me veía yo muy convencida. En realidad no estaba en el programa, pero la profe fue de lo más amable, y como siempre acabábamos pronto, me enseñó.

Luego aprendí a manejar un poco la máquina de coser que tenía allí. Una Juki, que creo que en cuanto tenga dinero me compraré. Una maravilla, pero a la vez muy sencillita de usar. No lleva pedal, va con botón. Y además corta automáticamente los hilos. Tiene muchísimos puntos decorativos, que son los que he usado para decorar la funda. E incluso escribe frases completas. También acolcha y tiene acolchado libre con las patas adecuadas. Una gozada, vamos.

El Domingo volví con mi marido, y pude hacer el taller del Bolso de Chenilla. Me enamoré de él en cuanto lo ví (me refiero al bolso, aunque también me pasó con mi marido, pero eso es otra historia...)

Esta foto me la sacó mi marido mientras esperaba pacientemente a que yo terminara de coser.

Estos talleres los impartía J. Pujol, una empresa y tienda que venden todo tipo de cosas y cosillas para quilteras. Están en Barcelona.

En su stand me compré una plancha pequeñita que es una gozada. La usamos en los talleres y realmente facilita mucho la vida. Ocupa poco, pesa poco, gasta poco (400 w, contra un mínimo de 1500 que tiene cualquier plancha normal) y calienta muy rápido. Tiene incluso vapor. He estado usándola ayer y hoy, y cada vez estoy más convencida de que ha sido una compra excelente.

También me compré unos lápices para tela, que también he probado ya. Y desde luego son muchísimo mejores que los normales. Se gastan menos y la punta se rompe muchísimo menos.

Y unas alfileres de punta plana y delgadas y largas, facilisimas de usar.

Aprendí mucho más que sólo a manejar una máquina de coser. Recordad que soy novata, y para mí todo esto era nuevo.


Había muchísimos talleres de todo tipo. Vi a unas señoras aprendiendo a pintar tejas con servilletas. De verdad que el resultado impresionaba.

Otro taller fue de cestería. Ese me dio mucha pena no poder hacerlo.

Había otras mesas con gente pintando bolsas de algodón, y en otra aprendían a hacer un agarrador de cocina con cintas de raso.

El domingo vi a otro montón de personas aprendiendo a manejar fieltro, tanto en seco como en mojado. Estuve un ratito mirando y creo que algún día me decidiré a probar.

En otra mesa había gente aprendiendo a hacer anillos de bisutería.

Hubo un rato que enseñaron a hacerte tu propio album de fotos, con tapas de madera decoradas.

Y una señora enseñaba a decorar una cajita con una especie de plancha de metal a la que se le hacían formas.

Fue una pena que no pudiera hacer todos los talleres que habá. De verdad, a cual más bonito e interesante.

lunes, 5 de febrero de 2007

Bilbo

¿Quien dijo que en Bilbao lo único que hay para ver es el Guggenheim? Pues no es así. Tiene miles de rincones y detalles, solo que no les hacen propaganda.

Lo cierto es que la primera impresión no es excesivamente buena. Cuando llegas por la autopista da la impresión de sucia y oscura. Ves fábricas en decadencia y en ruinas, otras funcionando pero viejas y oxidadas. Edificios altos, casas oscuras, pintadas por doquier...

Pero una vez que entras y empiezas a fijarte bien, la ciudad tiene un encanto especial.

En el centro, todas las calles tienen unos carteles muy bonitos.
Por cierto, ¿quien quería carteles de ciudades? Aquí hay uno.


Hay arte moderno por cualquier rincón que se pasee. Fijaros en esta estatua, supongo que de hierro. Parece un inmenso papel tirado en medio de la acera. Había dos, uno en cada lado de la acera.


Y fijaros en cómo está decorada la parte baja de este edificio. Son diferentes materiales de construcción muy normalitos, pero colocados de una forma especial.


Pillamos a todos estos cantando por la ciudad. Daban un bonito aire de medievo a la visita.

Y tienen una cantidad impresionante de edificios preciosos, de estilos distintos. Casas de indianos, edificios señoriales, grandes edificios de cristal con bajos de arcos de medio punto,... La mayoría con un buen granallado exterior serían la envidia de otras ciudades.

Resumiendo: que me han quedado muchas cosas por ver en Bilbao. Hay que volver.

¿Y el Salón de las manualidades? Pues perfecto. Os lo contaré más despacio con fotos en otro mail.

lunes, 26 de febrero de 2007

El SAL de Mercedes


Por fin me he puesto manos a la obra. Voy con unas cuantas semanas de retraso, pero dicen que nunca es tarde si la dicha es buena!!

Como no encontré un fieltro normal que me gustara, compré ese rojo, que es doble, por el otro lado es blanco. Realmente es precioso, pero claro, difícil de coser. También le da más cuerpo al costurero.

Este fin de semana también me decidí por fin a utilizar la técnica del cosido por detrás para actualizar un niki.

Primero busqué una flor bonita. Tengo unas telas de organdí o algo parecido de cortinas, y tenían estas flores blancas grandes tan bonitas.

Recorté la flor dejando un margen amplio, la puse con unas alfileres en el revés del niki y lo cosí con puntada normal en la máquina. Lo de hacer curvas con mi máquina no es algo fácil, pero en la pelea gané yo.
Con unas tijeritas muy afiladas, mi nueva adquisición en Tendencias Creativas, recorté la camiseta por el derecho, a más o menos medio centímetro de la costura, de forma que al final quedó la flor a la vista.


Me ha encantado tanto el resultado como la técnica. No será la última que haga.

Mi pelea con la máquina de coser este fin de semana ha sido épica. Y no siempre he salido victoriosa, la muy rebelde se me resiste.

He aprendido a que la ruedecita de la tensión no está de adorno, que realmente sirve para algo.

Y esos números de las agujas que siempre han sido un misterio para mí, también tienen algo que ver con que la máquina cosa mejor o peor.

Que si voy a bordar, tengo que poner la aguja más finita para que la tela se rompa menos.

He descubierto que mi máquina puede bordar. Es decir, tiene un levantapresillas para que la tela no corra, así que en buena lógica, tiene que poder hacer acolchado libre. Aunque todavía no lo he conseguido.

El caso es que he conseguido hacer otras tres mariposas, dos de ellas sin entretela, que es como a mí más me gustan. Aquí se ve mi progreso entre corazoncitos y mariposas. ¿Qué os parece la combinación de colores? En total tengo que hacer 49 bloques. 8 mariposas y el resto corazones.
Ayer por la noche, cuando me iba a sentar a aplicar algún que otro corazón más, vi que mi cestito de costura del salón estaba un rato triste. Ni una triste almohadita para las agujas. Y todas decís que son fáciles y rápidos de hacer.

Así que ni corta ni perezosa me busqué un paper piecing de cabaña de troncos en la red, y con los restos de telas que tengo en una cajita me puse a hacer una almohadita. Como soy novata en todo esto, hice casi tanto como deshice y me llevó algo más que "un ratito"

Tengo pocos restos, así que no había mucho que hacer con las combinaciones de colores, pero al menos queda colorida, graciosa y tengo un sitio donde poner mis alfileres.





viernes, 23 de febrero de 2007

Tendencias Creativas - Las servilletas

Pues sí, también me ha picado el gusanillo de las servilletas.

He hecho alguna cosilla con servilletas, pero como no tenía los medios adecuados, ni los encontraba, pues no me atrevía con las bandejas de cristal.
Pero en el famoso Tendencias Creativas había varios stands que mostraban cómo decorar con servilletas, y por supuesto tenían los medios adecuados.
Había un stand donde decoraban las bandejas por debajo con una especie de restos de taladro (ya sabéis, cuando haces agujeros a un papel, los redondelitos que sobran), y que pegados y combinados en diferentes colores resultaban unas bandejas preciosas.
Así que me compré el pegamento especial (se parece mucho al blanco de toda la vida, pero más aguado), y otro producto para cristalizar el resultado después.
En un "Todo a 100" encontré estas bandejitas de cristal transparente y baratito, ideales para hacer pruebas.




Y de momento tengo dos. He hecho una tercera, pero como no me ha gustado el resultado, la tengo en remojo, para limpiarla. Es la ventaja del cristal, que siempre se puede volver a limpiar.

Y también he aprendido algo: primero se echa el pegamento, y luego la servilleta, incluso en cristal. Porque si no lo haces así, corres el riesgo de que se te hagan minibolsitas de aire. O a que en el intento de quitar esas minibolsitas de aire se te rompa la servilleta y tengas que empezar de nuevo.

También compré unas cuantas servilletas con unos dibujos preciosos. Un poco caras sí que me parecieron, pero bueno, realmente le sacas mucho partido a una sola servilleta.

Lo más difícil de esta técnica es el diseño. Tardo más en ver qué dibujo pongo dónde y con qué lo combino, que luego en recortar y pegar.

Y en estos dos casos he finalizado pintando con pintura americana normal el fondo. Y luego les he echado el producto vitrificante.

Una técnica muy interesante, y sirve incluso para lámparas, que no se quema ni estropea. Habrá que probar.

jueves, 22 de febrero de 2007

Mi maravillosa máquina de coser

Hoy estoy emocionada. Yo creía que iba a tener que cambiar de máquina de coser, porque no conseguía hacer gran cosa con la mía.

¡Craso error! El problema no es la máquina, el problema soy yo.

He intentado un montón de veces bordar alrededor de un dibujo (o una aplicación) y mi máquina siempre se enganchaba.

¡Si es que hay que leerse las instrucciones!

Tengo una preciosa cajita negra que vino con la máquina y que tiene distintos tipos de patilla de arrastre. ¡Solo tenía que utilizar la correcta!

Ayer se me ocurrió cambiarla, y fijaros lo que he conseguido:

Claro, que la conseguí después de un montón de errores. En el libro están cosidas con hilo transparente en zig-zag. Eso no me gusta seguro.

Así que recorté las piezas con un poco de margen, para aplicarlo a mano con puntada escondida. Tampoco funcionó. Son tres telas puestas encima una de otra, y lo del dobladillo no quedaba nada bien.

Tercer intento, poner tela de la que pega por los dos lados, pegar todas las piezas y repasar a mano.

Empecé bien. Recorté las telas, las planché a la tela de pegar... Y no hubo forma de despegar el papel después. ¿Cómo se hace?

Así que no me quedó más remedio que acudir de nuevo a mi máquina de coser. ¡Y funcionó!

Ahora solo tengo que conseguir un poco más de práctica para dar los giros y esas cosas, pero bueno, como comienzo, creo que no está mal.

Este es mi nuevo proyecto, una colcha de corazones y mariposas en tonos cálidos (rojos, naranjas, ocres, cremas, rosas...)

Estoy utilizando una buena parte de los retales que compré en Tendencias Creativas. y como necesitaré más, es una buena forma de aprender a combinar colores.

miércoles, 21 de febrero de 2007

Marie-Thérèse Saint-Aubin

Ese es el nombre de la autora del maravilloso libro de gatitos que me compré en Tendencias Creativas en Bilbao.


Y esta la dedicatoria que me escribió en perfecto francés, y el regalito que me hizo, una aguja para el punto de cruz.

Y algunas muestras del contenido.


Tiene un blog, donde se pueden ver más obras suyas, y también solicitarle/comprarle gráficos.

De verdad merecen la pena.

Tendencias Creativas - El Fimo

Había Fimo en varios stands, pero me gustó especialmente uno que pertenecía a una tienda de Bilbao (no recuerdo su nombre, pero está por el centro de Bilbao).



Allí había una chica haciendo demos. Tenía una de esas maquinitas para aplastar el fimo y hacer láminas finas. También tenían allí mismo un horno pequeño portátil, donde cocían las piezas.



Hizo unos colgantes y pendientes en negro y azulón que quedaron preciosos. La pena es que no le hice fotos.



El caso es que por fin conseguí el barniz para Fimo. He de decir que fueron muy amables, porque no lo tenían y lo fueron a buscar a su tienda.


Y viendo que aquello no parecía muy complicado, me compré unos colores y estos son mis experimentos:

El primer intento. No me gusta nada, y creo que voy a deshacerlo. Los pendientes están bien, pero el collar creo que quedaría mucho más bonito mezclándolos con nudos de macramé y separando más los abalorios. En un collar largo.


Pendientes en rosa y gris. Ya tienen dueña, mi suegra se enamoró de ellos. Pendientes en naranja y amarillo con brillitos. Me encanta el color que quedó mezclando el rojo vivo y el amarillo.

Pendientes del barca. Azul, rojo y amarillo, mezclados en dos estilos distintos. Estos son los más pequeñitos.

Pendientes en amarillo y verde. El verde lo conseguí mezclando el amarillo y el azúl. También han quedado muy bonitos.

Y la joya de la corona:


Conjunto en azul, rojo y amarillo. Hice primero un cilindro con las flores. Un cilindro rojo para el centro, cinco cilindros amarillos para los pétalos y varios cilindros azules para cerrar.

Luego corté el cilindro de las flores con un cutter, y fui colocando las flores en las bolitas con un palillo. Una vez colocadas las flores le di un par de vueltas en la mano para redondear el conjunto, y ya está.

Ví un vídeo sobre cómo hacerlo en internet.

No me ha quedado ni la mitad de bien que en el vídeo, pero para ser mi primer experimento, creo que me puedo sentir orgullosa.

Me gustan muchísimo los pendientes de fimo, creo que compraré más colores y haré algunos más.

lunes, 19 de febrero de 2007

Tendencias creativas - Los stands y los quilts antiguos

Había todo tipo de stands. Concretamente éste versaba sobre bordados con cinta, con hilos de colores... Las letras que se ven en esta foto me parecieron preciosas, muy trabajadas.
Un quilt en venta, con botones, no acolchada. También se ven más stands. Había muchísimos de telas para quilts, aunque no entiendo porqué las telas son tan caras en España. Igual que en Francia, porque los precios de los stands franceses estaban por un estilo.

Muchos de los stands tenían además quilts expuestos, a cual más bonitos. Este ya es de la exposición. Es un quilt antiguo. Cuando lo ví me sorprendió que alguien tuviera el mal gusto de poner un quilt torcido y mal acabado en una exposición. Comprendédme, es mi primera exposición.

Resultó que era de 1800 más o menos. Y estaba hecho con trocitos de diferentes tipos de telas. Cuando me acerqué vi que una tela se parecía mucho a un traje que tengo. Por eso la diferencia de alturas. Según las telas fueran más o menos gruesas.

Y este es otro, algo más moderno, y con menos tipos de telas, pero también con muchísimos colores.

Un quilt que me sorprendió por su técnica. Es una tela de fondo, cosas puestas encima (cintas, trocitos de otras telas, restos de otros trabajos...), con un tul por encima y acolchado directamente a máquina. El resultado me impactó y parece algo fácil de hacer, siempre y cuando se acierte con los colores, claro. Estos quilts estaban en una esquina de un stand. Me parecieron originales y muy coloridos. Especialmente el de las flores me parece interesante para hacer. Están aplicadas.




miércoles, 14 de febrero de 2007

A escondidas le hice este cojín a Joaqui para celebrar San Valentín, y le ha encantado!!

¡Feliz San Valentín a todos!

Tendencias Creativas - Punto de Cruz

Pregunta mi hermana por el Punto de Cruz. Pues sí que había, y mucho.


Nada más entrar había dos exposiciones, una de quilts, que ya pondré, y otra de punto de cruz.
Sobre todo había cuadros de Eder Kits. Montones preciosos en blanco y negro, uno del Guggenheim muy logrado, algunos infantiles muy coloridos y divertidos, un piano que parecía que brillaba de verdad, un vaso con gotas de agua que parecían de verdad y algunas otras maravillas. No tengo fotos de todas, pero alguna muestra sí que podeis ver aquí.
Me gustó especialmente cómo habían enmarcado a la Madame Pompadour. Las columnas de los laterales están pegadas en el cristal por dentro. Quedaba espectacular, porque además el cuadro es grande.

Había otro stand, que a mí me pareció novedoso, con unos cuadros de punto de cruz que parecían sacados de pintadas en paredes.

Unos puntos pequeñisimos, en lino casi todo y con un solo hilo.

Los diseños espectaculares y el resultado ni os cuento. Ni idea de quién ha hecho tantísimos cuadros, pero seguro que no ha sido una sola persona. Habría necesitado una vida entera.

También había un stand con diseños para saquitos, alfileteros, y otro montón de cosillas que se suelen hacer en lino algo más oscuro. Son como muestrarios. No sé cómo se llama ese tipo de diseño, entre otras cosas porque hoy poy hoy a mí no me llama la antención, pero sé que en general en Francia gusta mucho y que también hay varios blogs en los que publican cosillas hechas de ese estilo.

En los stands había muchos cuadros que yo ya conocía, pero claro, no había visto más que en foto. Y no es lo mismo. El punto de cruz hay que verlo en vivo y en directo. Los tamaños son distintos a lo que me imaginaba, y por supuesto el brillo, la pedrería, el acabado... Auténticas preciosidades.

Pude ver una de las damas celtas terminadas. Estoy en varios grupos de punto de cruz, y sé que muchas han hecho alguna dama celta. El caso es que aunque me gustaban, tampoco me parecían tan espectaculares. Pues os diré que sí lo son. Las fotos que había visto hasta ahora no le hacían ningún favor. Son divinas, y creo que serán un proyecto que tendré en la cabeza para el futuro.

He dejado para el final lo que más me gustó. Era un stand con un montón de pequeños cuadritos, sólo esbozados, muy delicados, bordados en lino con un solo hilo en un solo cuadro. Vamos, que al principio pensé que estaban pintados.

En un rinconcito del stand había una señora vendiendo libros y me acerqué. Resulta que la señora es la diseñadora de estos gráficos. Primero hace el dibujo en papel milimetrado, luego va bordándolos y a la vez corrigiendo el gráfico. Por cierto, todo esto me lo explicó en perfecto francés. Y yo intentando recordad mi francés del cole.

Ahora no recuerdo su nombre, pero lo buscaré. Le compré un libro con gráficos de gatitos, que nos dedicó a Misha y a mí también en perfecto francés y que ya os enseñaré más en detalle. ¡Qué preciosidades! ¡Y tan delicadas! Me quedé con ganas de un gráfico que tenía allí de peces, con un brillo tan especial!

Otra cosa a añadir a la lista de cosas que algún día quiero hacer.

viernes, 9 de febrero de 2007

Olvidar la historia

Hoy estoy un poco triste.

Ayer hubo elecciones Sindicales. Da igual qué sindicatos sean, eso no es importante en esta historia.

Teníamos un Jefe del Comité de Empresa desde que se montó la primera empresa (la nuestra) fuera del país de origen de nuestra multinacional. Ha sido el mismo desde hace 18 años.

Luchó todos esos años para conseguir un montón de ventajas para los empleados. Trabajamos bastantes menos horas al año que lo que dice el Convenio del Metal, tenemos comedor casi totalmente financiado, jornadas reducidas y jubilaciones anticipadas en excelentes condiciones para quien quiere, paga completa cuando se está de baja, da igual el tiempo, y toda una serie de otras ventajas que no detallaré aquí que hacen que trabajar donde trabajo sea realmente un privilegio.

Llevo aquí también casi desde el principio, y he visto cómo ha luchado, negociado, presionado y hecho todo lo posible para conseguir cosas que yo pensé que jamás le concederían.

Desde las últimas elecciones hemos duplicado la plantilla, ha habido tiempos de bonanza, buenos proyectos, y todo ha ido genial. Entró muchísima gente recién acabado FP de ramas técnicas, se estaba dando prioridad a contratar jóvenes, especialmente.

Todos esos jóvenes se han encontrado ya con unas condiciones excelentes, y no han visto nada más, nunca han trabajado en otras empresas. Creen que las ventajas que tenemos aquí son normales, que tienen derecho a ellas y les parecen pocas. Creen que el Jefe del Comité que tenemos no es lo suficientemente agresivo y que hace poco por ellos. Porque no grita, no hace mítines políticos y consigue las cosas negociando.

Eso ha devenido que en estas elecciones haya ganado el sindicato contrario, que hoy por hoy no ha demostrado absolutamente nada, sólo que grita más y mejor. (Veis, en oficinas, donde la plantilla tiene más antiguedad y conoce la historia, eso no ha ocurrido)

¿Es que la historia ya no se tiene en cuenta? ¿Es que haber luchado y trabajado tantos años por conseguir ventajas sociales y monetarias de todo tipo ya no tiene valor? ¿Es que los jóvenes de hoy no aprecian lo que tienen?

¿Porqué hoy se escucha más al que grita que al que consigue cosas? ¿Porqué escuchamos más las promesas vacías de futuro, que lo que de verdad se ha hecho? Y esto vale tanto para mi historia como para el tema político general.

No digo que a veces los cambios no sean buenos. Seguro que sí. Pero olvidar la historia y no apreciar lo que se tiene, seguro que no puede llevar a nada bueno.

Por eso hoy estoy un poco triste.

miércoles, 7 de febrero de 2007

Tendencias Creativas - los talleres

¡Qué maravilla de Feria!

Fui el jueves, el primer día de la Feria, yo solita. A las once en punto estaba en el BEC haciendo cola. ¡Qué montón de gente!

Me fui directa al fondo, a apuntarme a los talleres de Patch a máquina, que a eso iba realmente. En la foto se ven las muestras de lo que enseñaban en cada módulo.

Y aquí debajo el resultado de lo que hice yo. Salí encantada. Lo primero que aprendí fue a hacer crazy. Nunca lo había hecho y en las descripciones no me aclaraba con eso de que pintas por un lado y coses por el revés y todo eso. Resulta que es la mar de fácil. Hicimos el bolsito chiquitito.

Lo siguiente fue aprender a hacer aplicaciones por el revés. Es decir, coses las telas por detrás y luego recortas por delante. El resultado es que se ven las telas que pusiste por detrás. Había visto esta técnica en una de las revistas que tengo y me gustó muchísimo, porque le ponían unas flores preciosas a un niki. Pero no acababa de entender las explicaciones. Ahora ya sé cómo se hace, ya puedo decorar alguno de mis nikis.

Ese mismo día por la tarde estve haciendo la fundita para el móvil. Primero aprendí a hacer aplicaciones con máquina de coser, que tampoco me veía yo muy convencida. En realidad no estaba en el programa, pero la profe fue de lo más amable, y como siempre acabábamos pronto, me enseñó.

Luego aprendí a manejar un poco la máquina de coser que tenía allí. Una Juki, que creo que en cuanto tenga dinero me compraré. Una maravilla, pero a la vez muy sencillita de usar. No lleva pedal, va con botón. Y además corta automáticamente los hilos. Tiene muchísimos puntos decorativos, que son los que he usado para decorar la funda. E incluso escribe frases completas. También acolcha y tiene acolchado libre con las patas adecuadas. Una gozada, vamos.

El Domingo volví con mi marido, y pude hacer el taller del Bolso de Chenilla. Me enamoré de él en cuanto lo ví (me refiero al bolso, aunque también me pasó con mi marido, pero eso es otra historia...)

Esta foto me la sacó mi marido mientras esperaba pacientemente a que yo terminara de coser.

Estos talleres los impartía J. Pujol, una empresa y tienda que venden todo tipo de cosas y cosillas para quilteras. Están en Barcelona.

En su stand me compré una plancha pequeñita que es una gozada. La usamos en los talleres y realmente facilita mucho la vida. Ocupa poco, pesa poco, gasta poco (400 w, contra un mínimo de 1500 que tiene cualquier plancha normal) y calienta muy rápido. Tiene incluso vapor. He estado usándola ayer y hoy, y cada vez estoy más convencida de que ha sido una compra excelente.

También me compré unos lápices para tela, que también he probado ya. Y desde luego son muchísimo mejores que los normales. Se gastan menos y la punta se rompe muchísimo menos.

Y unas alfileres de punta plana y delgadas y largas, facilisimas de usar.

Aprendí mucho más que sólo a manejar una máquina de coser. Recordad que soy novata, y para mí todo esto era nuevo.


Había muchísimos talleres de todo tipo. Vi a unas señoras aprendiendo a pintar tejas con servilletas. De verdad que el resultado impresionaba.

Otro taller fue de cestería. Ese me dio mucha pena no poder hacerlo.

Había otras mesas con gente pintando bolsas de algodón, y en otra aprendían a hacer un agarrador de cocina con cintas de raso.

El domingo vi a otro montón de personas aprendiendo a manejar fieltro, tanto en seco como en mojado. Estuve un ratito mirando y creo que algún día me decidiré a probar.

En otra mesa había gente aprendiendo a hacer anillos de bisutería.

Hubo un rato que enseñaron a hacerte tu propio album de fotos, con tapas de madera decoradas.

Y una señora enseñaba a decorar una cajita con una especie de plancha de metal a la que se le hacían formas.

Fue una pena que no pudiera hacer todos los talleres que habá. De verdad, a cual más bonito e interesante.

lunes, 5 de febrero de 2007

Bilbo

¿Quien dijo que en Bilbao lo único que hay para ver es el Guggenheim? Pues no es así. Tiene miles de rincones y detalles, solo que no les hacen propaganda.

Lo cierto es que la primera impresión no es excesivamente buena. Cuando llegas por la autopista da la impresión de sucia y oscura. Ves fábricas en decadencia y en ruinas, otras funcionando pero viejas y oxidadas. Edificios altos, casas oscuras, pintadas por doquier...

Pero una vez que entras y empiezas a fijarte bien, la ciudad tiene un encanto especial.

En el centro, todas las calles tienen unos carteles muy bonitos.
Por cierto, ¿quien quería carteles de ciudades? Aquí hay uno.


Hay arte moderno por cualquier rincón que se pasee. Fijaros en esta estatua, supongo que de hierro. Parece un inmenso papel tirado en medio de la acera. Había dos, uno en cada lado de la acera.


Y fijaros en cómo está decorada la parte baja de este edificio. Son diferentes materiales de construcción muy normalitos, pero colocados de una forma especial.


Pillamos a todos estos cantando por la ciudad. Daban un bonito aire de medievo a la visita.

Y tienen una cantidad impresionante de edificios preciosos, de estilos distintos. Casas de indianos, edificios señoriales, grandes edificios de cristal con bajos de arcos de medio punto,... La mayoría con un buen granallado exterior serían la envidia de otras ciudades.

Resumiendo: que me han quedado muchas cosas por ver en Bilbao. Hay que volver.

¿Y el Salón de las manualidades? Pues perfecto. Os lo contaré más despacio con fotos en otro mail.